La Vida en la Naturaleza ♡ Días de Otoño

Esto se está poniendo cada vez mejor... antes que nada, me gustaría contarles, por cosas que he hablado con alguna amiga, que estoy muy feliz, y quizás parecería lo contrario... Intenté relatarles toda mi experiencia desde el día uno, lo más real posible, pero se que a veces soy un poquiiito exagerada... bah, eso me dice Jo, que soy exagerada pero yo digo que soy "emocional" jajaja. Como todos, a veces tenemos momentos felices, momentos no tanto... en mi caso cuando estoy triste no intento revertirlo, lo dejo pasar, y nunca me dura más que unas horas, pero me pasa desde que soy chiquita, y está bien así, es parte de mi personalidad y también lo disfruto así, imagino que a todos nos pasa igual. Eso también es parte de la felicidad como un todo ¿no lo creen? no es que cuando uno es feliz está el 100% del tiempo feliz, es más como un concepto general o un camino que vamos construyendo. Para mi la felicidad es escucharme y escuchar lo que me rodea, evitar el sufrimiento de todo ser que me involucre directamente (o a veces también indirectamente) y eso es lo que estoy tratando de hacer desde hace muchos años y lo voy a seguir haciendo hasta el final de mis días. Para nada es mi intención generar un post existencial, solo quería aclararles que estoy muy contenta con la nueva vida, y que si bien algunas veces me he sentido un poco superada, nunca jamás dudé un segundo en el camino elegido. 

Ahora si, vamos con lo que quería contarles ^_^ 

Los días por acá siguen siendo nublados ¡Qué otoño más húmedo! Tengo que ponerme creativa, si no se puedo avanzar con la casa, o no tengo luz, me invento actividades desenchufadas... Una de las actividades que más hice fue salir a explorar, les conté que la casa está en una lomada y si seguimos hacia el sur, pasando la pirca nos encontramos con el monte. Pastizales y plantas nativas, espinillos y molles. Fui a buscar unos plantines para poner en un cantero nuevo que da a la entrada de la casa. Es un arbusto que creo es Lippia o Lantana, pero con flores rosadas, es preciosa y por acá hay muchas, así que intuyo que se adaptan bien. Busqué los más pequeños,  y realmente deseo que prosperen. También fui a pasear para el otro lado, justo yendo hacia el norte, bajando la lomada, hay un cañadón con un manantial o vertiente o no se como se llamará, cuando brota agua de las piedras, cae a una pequeña fuente y sigue un pequeño arroyito. 

Hay helechos de mil especies, y la mayoría de los árboles y arbustos son exóticos, hay acacios negros, acacios blancos y crataegus. Algunos pastitos, y muchísimos líquenes. Lo más lindo para mi son los helechos naciendo entre las piedras. También descubrí algún que otro honguito. La otra noche soñé algo increíble: me despertaba y miraba para el bosque y era de cuentos, pero de cuentos literal. Había una luz preciosa que se filtraba entre las ramas de los árboles, una luz mágica, estaba repleto de helechos de todas las formas y mil amanitas (los hongos con el sombrero rojito y pintitas blancas) con las más perfectas formas. Bueno, creo que si este bosque tuviera amanitas sería tal cual mi sueño. Otra de las cosas que adoro del bosquecito, son los árboles y ramas caídas repletos de musgos y líquenes. En el corazón del bosque hay un álamo centenario que tapiza un radio enorme en su base de hojas doradas... Les dije que no es muy distinto a mi sueño. Por ahora exploré hasta ahí, y tengo mucho tiempo para ir recorriendo cada rincón. 

Otras de las cosas que hice en estos días nublados fue cocinar ¡un montón! qué felicidad me genera tener horno. Hice tarta de manzanas, de peras, budín de zanahoria, brownie de algarroba y cacao o solo de algarroba, hice papas especiadas, tarta de calabaza, ufff si sigo no termino más... Ahhh lo más rico, las pizzas de Jo, deliciosas y además tienen ese gustito de hecho por él, como hay demasiado para hacer en la casa en el sentido de "obra" arreglos, etc, me estoy haciendo cargo más de las tareas cotidianas y Jo de las remodelaciones, así avanzamos... entonces por lo general cocino yo.

También ahora, muy de a poquito, empecé a trabajar en La Maison Naturaliste, pero con algo especial, un cumple en el bosque que me tiene por demás entusiasmada, porque desde antes de mudarnos tengo muchísimas ganas de hacer objetos inspirados en el bosque y en cuentos infantiles del estilo, porque el lugar se presta a eso, y también las estaciones de otoño y de invierno me inspiran lo mismo. Ya les iré contando, es más haré, un post especial sobre este cumpleaños seguramente, cuando tenga todo terminado... Qué bello se está tornando nuestro día a día en La Vida en la Naturaleza...