Our Lovely Garden

Una de las cosas que más anhelaba viviendo en la ciudad era tener un jardín que asemeje a una pradera de flores silvestres. No tenía idea de cómo lograrlo, por eso mismo fui al vivero unos días antes de mudarnos. Quería que me orientaran y además semillas de un "mix de pradera" pero tal cosa no existía y cuando les pedí información me miraron con cara rara, así que elegí las flores que me parecieron más silvestres: Cosmos de colores, amapolas de california, lino azul, aliso, gysophila  y otras más que no recuerdo. Tampoco sabía como sembrarlas y lo hice siguiendo las instrucciones del paquetito, para mi sorpresa algunas brotaron. Tuve amapolas de colores, algunas cosmos y el aliso que duró unos años. De los linos y las demás ni noticias. No quería seguir en la ignorancia sobre el tema, así que empecé a observar y a entender, muy de a poco, que las cosas no funcionan igual en todos lados. Depende de muchos factores, el clima de Buenos Aires no es igual al de Córdoba, tampoco los insectos.

Durante ese tiempo, entre otras cosas, aprendí que las flores silvestres son las que crecen en el lugar, ya sean asilvestradas o nativas, que el cardo es exótico y que dejando que "crezca todo" a menos que tengamos mucha suerte, no tendremos un jardín muy bonito. También aprendí que aunque en invierno no haya plantas, en verano el verde se vuelve incontrolable y por lo tanto el jardín algo trabajoso. Hace casi 6 años que vengo aprendiendo de jardinería y botánica, siento que la mejor forma de hacerlo es la observación y la experiencia propia. Es más, muchas experiencias fui compartiéndolas en este mismo blog, por tanto es que siento que aprendimos juntos. Como cuando empecé el banco de semillas nativas, o cuando hice mi primer herbario, hasta cuando les compartí sobre cómo identificar las semillas para que ustedes también puedan recolectarlas. 

Empecé a buscar flores de la zona que me gusten y fui probando: cuáles sobrevivían a la sequía, para no tener que regar demasiado, cuáles sobrevivían a las hormigas, para no tener que empezar una batalla que seguro perdería, cuáles se auto-siembran, cuáles son solo bonitas y cuáles atraen vida y vuelven al jardín un "jardín completo". Porque cuando una flor me gusta mucho, lleva pocos cuidados y además atrae vida se gana mi corazón. Y así es como en estos casi 6 años de vivir en las montañitas hubieron plantas que pasaron todas las pruebas, incluso la de las hormigas, que hoy en día para mí es la más importante, porque vivimos en una casa donde hay hormigas hasta en el techo. Sigo haciendo pruebas claro, sobre todo con plantas nativas que son mis favoritas, ya les compartiré tal experiencia, pero en realidad esta introducción es para contarles una novedad que se viene gestando hace 6 años. La experiencia de tener un jardín es hermosa y nos enseña tanto que todos deberíamos tener la posibilidad de practicarla. Nos enseña sobre la vida, el renacer, la muerte, las frustraciones, el entorno, la paciencia y nos conecta con la felicidad más pura y simple ¿Imaginan de qué se trata lo que quiero contarles? 

Si la respuesta fue: una nueva línea llamada Our Lovely Garden ¡acertaron!. Fruto de nuestro jardín, cosechado con nuestras manos, rústico e imperfecto como la vida en el campo. Era inminente y ya no podía sostenerla más en la incógnita, mi taller provisorio (el lavadero) así me lo pedía. Ya no tenía dónde más guardar semillas, ni preservar flores. Hace un tiempo que mi taller está de imposible acceso, por qué ¿quién puede desechar algo tan hermoso? Cuando después de la primavera, el jardín se renueva, las viznagas secas, los frutos de amapolas mezclado con las gramíneas parecen esculturas de la naturaleza. En el otoño las cosmos no quieren dejar de florecer y las chinitas con sus últimas fuerzas  y sus tonos amarronados, siguen siendo tan bellas como en el verano, y nos regalan sus semillas para que podamos seguir embelesándonos con sus formas y colores. 

El jardín desborda de magia y toda esa magia quiero que esté presente en la nueva línea. Por supuesto que habrá semillas, de esas flores que superaron todas las pruebas, para que aunque no tengas experiencia puedas disfrutar de un hermoso jardín. Pero también habrá ramos de flores preservadas, láminas de flores prensadas y otros artilugios botánicos. Me hace feliz saber que cada uno de los objetos que la integrarán fueron cultivados y cosechados en nuestro jardín, sin ningún tipo de pesticida ni fertilizante, lo que los convierte en agroecológicos.Todo vendrá con información detallada y acompañada de hermosas ilustraciones alusivas. Esta semana empezaré a listar los primeros ítems en la Tienda Online, para que todos podamos disfrutar de un jardín lleno de vida.






Comentarios

  1. Sabia....,semillas�� ,lo de los ramos no me imaginé pero si lo de las semillas.

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  2. Hace 9 años vinimos a vivir al bello Merlo, San Luis, mis montañitas adoradas, los Comechingones!! Y hay tantas flores nativas que me fascinan... A empezar la recolección!

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