~ Christmas at Orchard House ~

 Un clásico navideño que no puede faltar, una publicación de nuestra casa decorada para la ocasión. 

Les conté otras veces que, ya sea que la pasemos solos o acompañados, se celebra lo mismo. Adoro esta época del año y aunque me encuentra muy atareada con La Maison Naturaliste, siempre intento guardarme algo de energía y preparar adornos para cada rincón. 

Hay una tradición que nunca falta, la de ir en busca de un Pino verdadero, este año encontramos uno especialmente hermoso, su forma era perfecta y estaba frondoso por las lluvias primaverales que fueron abundantes. Siempre decoro con moños, esta vez los hice de retacitos de puntillas antiguas que vengo guardando hace tiempo, y además sumé campanitas doradas y un gran moño de encaje haciendo de "Punta de Árbol". 

Uso las mismas coronas de pastos hace años, pero les cambio los lazos o le agrego distintas flores secas. Los candelabros de bronce los conseguimos hace meses en una feria de garaje y estuve esperando hasta este momento para hacerle estos adornos con cintas de terciopelo. Al igual que el vajillero, que esta vez también se vistió especialmente. Las dos ideas las vi recientemente en Pinterest (gran fuente de inspiración) y me encantaron así que las puse en práctica.

El hogar, aunque no se use en estos meses de verano, me parece tan navideño que no quería dejarlo despojado. Armé una guirnalda con hortensias secas que, se darán cuenta por el color, tienen varios años, y le sumé campanitas doradas y por supuesto, moños de terciopelo. 

Hace poco cambié la disposición de los muebles del living, además de reubicar la mesa ratona, saqué la mecedora del piso de madera situándola justo al lado de la biblioteca, pegada a la ventana. De esta manera se usa mucho más, ya que queda justo debajo de la lámpara y disfruto mucho de leer por las noches mientras me hamaco. A la mecedora le colgué cascabeles, como queda en un lugar de paso, cada vez que las rozamos se mece y suena mágico. La rama del jarrón es un espárrago fructificado. Acá los espárragos abundan silvestres, creciendo por todos lados y cuando se alzan justo en esta época, con esa forma cónica y los pequeños frutitos que van cambiando del verde al rojo, me parecen perfectamente navideños. 

El 24 nos pasamos todo el día tomando mate, leyendo, cocinando rico. Jo se encargó de preparar la mesa salada, hizo seitán (un clásico de todos los años) berenjenas al escabeche y unas papitas doradas con ajo y romero. Yo me encargué de lo dulce, garrapiñadas de nuez de pecán y almendras y avellanas bañadas en chocolate. Además brindamos con agua tónica artesanal que producen unos amigos (Soda Vanguardia)  y estaba deliciosa. Para Nochevieja aún no sabemos bien qué cocinar, lo que sí, Jo ya hizo unos pepinillos en conserva que los abriremos esa noche y yo tengo muchas ganas de hacer flan de coco pero también una torta, ya veremos ^_^

Espero que hayan pasado una Navidad mágica, que tengan un muy feliz fin de año y un mejor comienzo. Nos veremos muy pronto por aquí, ya que comenzaron mis vacaciones y voy a hacer cosas que disfruto mucho como por ejemplo, publicar en el blog :) 

¡Felicidades!