~ an Everlasting Garden ~ #4 Feverfew

Me encuentro una vez más repasando experiencias y aprendizajes para compartirlas con ustedes, me parece precioso y además siento que es una práctica muy útil poder recapitular todas las siembras y cosechas (con sus errores y aciertos) de años anteriores y resumirlas en un post. Ya falta muy poquito para comenzar con la siembra de otoño, es decir  plantas que se desarrollarán durante el otoño/ invierno para florecer en primavera y terminar su ciclo fructificando a finales de la estación.

Flores con una mariposa Adelita Polilla (Adelotypa tinea)

La época de siembra siempre depende de la zona donde vivamos, aparentemente el cambio climático que estamos vivenciando, hizo que algunos lugares donde antes era impensado sembrar en otoño ahora lo estén implementando. Sigo muchas cuentas en Instagram de jardinería de países del hemisferio norte y he empezado a notarlo. Antes en estos países siempre sembraban en primavera lo que acá sembrábamos en otoño, incluso las amapolas allá florecen en verano. Una locura, todavía tengo esperanzas que el cambio climático no sea tal, solo sea un ciclo más de la naturaleza como ha pasado décadas anteriores, incluso siglos atrás y luego todo vuelva a acomodarse. 

Combinada en el mismo cantero con Zinnia peruviana

Este verano en las montañitas fue realmente muy extraño, veníamos de una sequía de casi 4 años (desde el verano del 2020 a la primavera del 2023) que terminó en enero con una tormenta enorme, la más grande que viví, donde cayeron 160 mm en pocas hojas y el granizo fue enorme, el jardín quedó destrozado por supuesto pero volvió a rebrotar (al menos una parte) y cuando se estaba poniendo hermoso vino la ola de calor de fines de enero con 40 grados y 0 lluvia, a pesar de eso resistió aunque ya más débil, pero en febrero hubo otra tormenta, no tan grande como la de enero pero bastante importante con mucha piedra y muchísima agua en poco tiempo, ahí el jardín ya casi no dio más y yo lo solté. Ahora es un descontrol selvático donde casi no se puede pasar, esperaré, recolectaré semillas, limpiaré después que caigan las primeras heladas y volveré a empezar. 

En su momento de mayor esplendor, a finales de diciembre

Mientras tanto ya tengo todo diagramado, dónde irá tal o cual planta, nuevos canteros y estoy preparando mucho compost. Este año voy a probar de sembrar más tarde, a ver si puedo evitar que se vaya todo en flor tempranamente en el veranito invernal serrano, para después helarse en octubre. De todas formas, nunca pruebo una sola cosa por si no funciona, voy también a sembrar como siempre y estará lo de resiembra espontánea que semilló el año pasado. Siempre que me preguntan recomiendo no hacer una sola cosa, más si es a modo experimental, por ejemplo, cuando siembran, no usar todas las semillas, probar algunas en siembra directa, otras en almácigo y guardar algunas para el año siguiente por si por algún motivo no prosperaron.

 

Después de toda esta introducción, ahora sí vamos a la planta que vengo a presentarles hoy: Tanacetum parthenium  “Feverfew”

Esta preciosísima flor la descubrí por Dalila @la_jardinera_cientifica el año pasado, ella compartió un ramo enorrrrme que cosechó de su jardín y quedé embelesada, la necesitaba por supuesto, en el mío. Tiempo después ella organizó una visita guiada a Weleda que es acá cerquita en Villa Berna y nos invitó, así que fuimos, de paso nos conocimos y por supuesto, intercambiamos semillas. Algunos le dicen “Manzanilla Perenne” al parecer es medicinal, no es muy parecida a la manzanilla, y no tiene ni cerca el aroma tan rico aunque es bastante aromática. En la variedad que tengo, sus flores son dobles (hay con flores simples también) lo que la hace aún más linda. Es ideal para flor de corte, dura muchísimo en el florero, pero también es perfecta para secar, queda un poco más pequeña y torna al cremita, no tan blanco como cuando fresca, aún así aporta un estilo pradera precioso a los ramos. Y además, como si todo esto fuera poco, es una flor comestible, así que si tienen un emprendimiento de pastelería ya saben que planta sumar al jardín.

Un ramo perenne secado al aire

Es de muy fácil cultivo, tiene un porte mediano, es ideal para canteros bajos, la floración es larguísima, empezó en primavera y aún lo sigue haciendo aunque en menor medida y con tallos más cortos. En el medio le hice una poda, sacando todos los tallos secos y cosechando los frutos maduros. Supuestamente es perenne, pero todo depende del clima, vamos a ver cómo se comporta cuando lleguen las primeras heladas.

La siembra la realicé en otoño, en bandeja. Las semillas son ínfimas así que conviene esparcir un puñadito lo más parejo posible y de ahí van a brotar unas cuantas. Cuando tuvo al menos 4 hojas verdaderas repiqué y pasé a macetas individuales. Es decir, levanté el pan de tierra que contenía varias plántulas y las separé desde las raíces. Son súper rústicas y resistentes, no les afecta el repique, háganlo sin miedo, pero es importante tomar ciertos recaudos. 

~Hacerlo en un lugar y día fresco a la sombra, preferentemente con luna descendente

~ Con la tierra húmeda pero no chorreando, 

~Una vez pasada a macetas no exponer al sol directo por unos días, hasta que se les pase el estrés del trasplante, 

~Jamás dejar que se seque la tierra pero tampoco que se encharque. 

~ Luego de esto esperamos a que pase el riesgo de heladas en primavera y ahí las llevé a su lugar definitivo, preferentemente en un día de luna descendente. Siempre es mejor esta fase lunar para trasplantes ya que la fuerza está en la raíz.

Así quedan después de secas, estas tienen casi 3 meses. 

El cantero es mejor que no tenga plantas muy altas para que no compitan en luz, sino tiende a caerse, el suelo no tiene ningún requerimiento especial, solo que tenga buen drenaje ya que no tolera encharcamientos. Regar cada 3 días si no caen lluvias en la temporada. Tardan en desarrollarse pero a principios del verano ya se pueden ver las primeras flores y son un verdadero sueño. Si queremos alargar la floración tenemos que cortar sus flores y eso no es ningún problema ya que embellecen cualquier ramo. Este año probé de cauterizar los tallos de algunas flores antes de ponerlas en el florero y me funcionó muy bien, les alarga la vida después de cortadas. Es bastante simple, una vez que realizaron el corte diagonal en los tallos, les retiramos las hojas más bajas que pueden tocar el agua, y sumergimos algunos centímetros del tallo en agua hirviendo por 10 segundos, no más porque las cocinan, pero no menos así llegan a cauterizar. Enseguida pasan los 10 segundos las sumergimos en agua fría y listo. Cambiar el agua de los floreros todos los días y ponerle una pizca de bicarbonato de sodio ayuda también a que no proliferen las bacterias que son quienes descomponen la materia orgánica y hace que las flores duren menos.

Para cosechar las flores para secar, tienen  que estar completamente abiertas, podemos hidratarlas antes de colgarlas, para que estén bien pomposas, para eso sumergimos los tallos algunas horas en agua fresca. Pasado ese tiempo armamos manojitos no muy grandes y los colgamos suspendidos boca abajo en un lugar oscuro, seco y aireado.

 Para cosechar las semillas tenemos que esperar a que el fruto esté completamente marrón y seco.

También queda preciosa prensada y como flor comestible para decorar tortas. Ya haré un capítulo especial sobre flores comestibles, que es una maravilla que estuve experimentando el último año.

Y así quedan prensadas, una belleza. 

Hasta acá llegó este nuevo capítulo de ~an Everlasting Garden~ espero que lo hayan disfrutado y les haya contagiado las ganas de sumar a esta belleza al jardín. Por supuesto que pueden conseguir las semillas en la Tienda junto con un montón de otras variedades ideales para armar ramos perennes

¡Nos vemos prontito!