Un año y...

Este post lo escribí hace 4 meses pfff... hoy lo releo, le corrijo algunas cosas y lo comparto con ustedes:

Ya van un año y dos meses de una experiencia que me cambió la vida, bueno en verdad cualquier cosa nos puede cambiar la vida (para bien) si nos lo proponemos. Incluso una vuelta al parque, lo importante es estar siempre abierto a nuevas experiencias. Creo que hoy puedo ser un poco más objetiva que hace un año atrás. Después de vivir y experimentar en primer persona lo que es habitar una casa de barro. 

La primera vez que oímos hablar de esta casa no le teníamos tanta fe, vinimos a conocerla igual porque con verla no perdíamos nada. Hace muchos años atrás, pero muchos, creo que debería coincidir con cuando se estaba planificando esta casa, tuvimos la idea de vivir en una casa de barro y paja. No se cómo nos enteramos de este tipo de construcción realmente. Vimos algunos documentales y Jo que es el más interesado en el tema, leyó algunos libros que descargó en pdf. Estábamos con la intención de, en algún momento, vivir en medio de la naturaleza, en ese momento habitábamos un monoambiente en Haedo. Queríamos ahorrar, comprarnos un terreno y auto-construir. La primera idea era hacer la casa con fardos de paja y revocarlos con barro, es una técnica, no se si tiene un nombre más que "fardos de paja y barro". Con el tiempo desistimos de esta idea, porque al ser Jo carpintero, y como queríamos auto-construir, pensamos que lo más acertado era hacerlo en un material donde al menos ya teníamos experiencia: la madera. La idea fue mutando, y la última fue una casita de madera, pequeña, usando la mayor cantidad posible de materiales recuperados.

Bueno, si les tengo que decir ahora cómo nos vamos a hacer nuestra casita, cuando sea que la hagamos, realmente no lo sé. Lo que sí sé es cómo va a ser más o menos el diseño, la distribución y el tamaño, queremos una casa pequeña, fácil de mantener, fácil de limpiar. ¿Por qué lo de pequeña? Además de ser mucho más ecológico, con Jo tenemos el síndrome del monoambiente. Fue nuestro primer hogar, y lo mantuvimos casi cuatro años, Sueño, incluso Folavril, llegaron a vivir allí...

Esta casa es muy enorme, ni siquiera sé como voy a hacer para tener mi taller arriba, voy a extrañar estar cerquita de la cocina, con los perris o tomando mate con Jo mientras bordo... sé que al final, arriba solo va a ser más un lugar de guardado y de hacer cosas que requieran más espacio pero voy a terminar trabajando en la cocina como ahora ^_^

Retomando, no se cómo vamos a construir, de a poquito el barro nos está enamorando como la primera vez. Quizás hagamos algo mixto, mucha carpintería, y algo de adobe (ladrillos de barro) porque las otras técnicas como quincha o fardos me parecen muy laboriosas, pero para esto falta... años, no lo sé, por ahora es sólo un sueño. Por esto mismo hoy voy a contarles sobre algo que sí pasa: el presente.

Voy a intentar ser lo más objetiva posible. Porque a veces uno idealiza o prejuzga, y al final resulta que las cosas no son tan así, ni para un lado ni para el otro, podés romantizar e inclinarte hacia el lado ingenuo y podés prejuzgar hacia lo negativo. Cuando se construyó esta casa, poco y nada se sabía sobre la construcción sustentable o la bio-arquitectura al menos en Argentina. Dicho sea de paso, salió una nota en la revista Living hace muy poquitos días, sobre este tipo de arquitectura, y muchas de las fotos que usaron para ilustrar la nota fueron de construcciones de uno de los arquitectos que hizo esta casa, es más, algunas fotos las tomó un amigo Andi Dominguez solo que como fue a través del INTI no estuvo en los créditos. 

Esta casa fue la primera que se construyó en la zona de este estilo, dio el inicio a una corriente en el Valle. Por eso y como les conté alguna vez, es una especie de laboratorio donde se probaron muchas técnicas. Algunas funcionaron, otras no tanto, lo importante es que la casa sigue en pie y ahora la estamos volviendo a la vida, esperamos, a una larga vida como casa pionera. 

De lo primero que voy a hablarles es de la orientación. Está pensada, claro, en todas las casas sustentables lo está, y así debería serlo en absolutamente todas las construcciones, es lo primero que tendríamos que tener en cuenta. Lo que hicieron es casi de manual, entrada al este, ambientes y ventanales al norte, galería al oeste y montaña al sur, literalmente. Sí, dejaron la montaña, toda la pared sur de la casa es la montaña, luego un muro de concreto, luego el barro. Solo tiene unas pequeñas ventanas bien arriba, que en realidad están a la altura del suelo, tipo sótano. Esto se practica bastante en lugares muy fríos o ventosos, pero acá trajo algunos problemas. Filtraba agua por todos lados, porque además la caída de la ladera es hacia la casa, y no tiene zanjas ni desagotes por donde el agua pueda fluir, entonces termina acá, en la casa. 

También, dejaron un pedazo de montaña en el interior, la famosa piedra, que me generó sensaciones encontradas, ahora la quiero, podemos decir que somos amigas, pero ¡ay! al principio. Según nos cuenta la dueña, esa piedra y la que está afuera (pegada al ventanal del sector de lectura) son las dos piedras que definieron la forma de la casa, ya que no las querían sacar. Por las dos piedras se filtró agua, y por suerte es algo que solucionaron personas que anteriormente habitaron este lugar. Ahora no se filtra más, pero hubo consecuencias claro. La piedra se pudrió, una piedra podrida se convierte en tierra, así es como ésta se desgranaba con solo mirarla, pero ya les contaré en el capítulo de la restauración del living, cómo logramos recuperarla. Del lado sureste el problema no estaba solucionado. Los días de lluvia intensa entraba mucha agua, se hacían charcos adentro y Jo lo solucionó cavando una zanja con caída para que el agua fluya y no termine dentro de la casa. La cavó un día de otoño lluvioso, lo que le valió un gran resfrío, pero lo bueno es que ya no entra más agua. 

En mi opinión, no fue una buena opción dejar la montaña, estamos en un clima bastante templado y el viento sur, sopla como mucho, pero como muchísimo 10 veces en todo el invierno, y en el verano trae temporales con lluvia y baja de temperatura, por tanto es muy bienvenido, ya que trae fresco a los días calurosos y secos del monte, que suelen ser varias veces durante la época más cálida. Entonces, tener reparado el sur en un lugar como este no me parece necesario, quizás en la Patagonia lo sea, además me parece una buena opción en verano poder abrir las ventanas orientación sur ya que refresca todo el hogar como les conté, y al ser éstas paños fijos no tenemos la opción.

Con respecto a los ventanales hacia el norte, es algo que me parece muy hermoso, hay mucho sol, quizás sea demasiado, no sé. Acá las estaciones intermedias (primavera-otoño) suelen ser calurosas, entonces en otoño temprano y en primavera tardía, cuando el sol aún está bajo, entra demasiado calor. Esto se solucionaría con aleros desmontables, los ponés cuando no querés sol y viceversa. También con cortinas pesadas, pero ya saben que a mi las cortinas mucho no me gustan, con todas las tareas que hay para hacer en el campo, lavar cortinas sería una más, y créanme, cuanto menos mejor. También podrían hacerse aleros calculados, con determinada inclinación para que cuando el sol aún está bajo y hacen días calurosos, el sol no entre. 

En cuanto a la galería al oeste me parece acertado porque el sol del oeste acá es muy poderoso, aunque como esta casa está en una depresión, no entra mucho sol desde esa orientación, ya que se pone enseguida detrás de la ladera. Si están pensando en construirse una casa, piensen en la orientación muy minuciosamente, todo cambia dependiendo el lugar donde la hagan, no solo el punto geográfico, sino también el lugar específico, si es cerca del agua, en una ladera, en una depresión, en una llanura etc. todos los paisajes tienen sus ventajas y desventajas que hay que saber aprovecharlas al máximo para que después, calefaccionar, iluminar y refrescar nuestro hogar sea algo que se dé lo más naturalmente posible, aprovechando los mismos recursos que nos brinda la naturaleza.

Ahora me toca hablar del material, mi tan amado-odiado barro. No, mentira, realmente hoy puedo decir que lo amo. Es indiscutible su beneficio por donde se mire. El barro es básicamente arcilla, se puede comprar, o se puede hacer un pozo donde vamos a construir y usar la del lugar. La primera capa de la tierra es humus, y dependiendo que tan fértil sea la tierra, es la profundidad donde se encuentre la arcilla, el humus es vida, la arcilla está muerta, por eso también es tan ecológico, porque el humus es la capa con más vida de la tierra, usarla para construir sería generar un daño tremendo al ecosistema. Y tengo que hacer referencia a esto que me enteré hace poco: el humus se usa para la fabricación del ladrillo clásico, generando un verdadero desastre ecológico, ya que el humus tarda miles de años en formarse, además requiere horneado y se hace a cielo abierto contaminando el aire, qué tremenda noticia ¿no les parece?. Los ladrillos de adobe son completamente ecológicos, porque además no se hornean, sino que se secan al aire.

Retomando, podés hacer un pozo y construir con tu propia arcilla. El barro para construir es una mezcla de arcilla, arena y agua, no voy  ahondar en detalles, para eso están los expertos y claramente yo no lo soy ;). Al principio el barro no me gustó nada, el olor que tiene, primero no me molestaba pero después si, el color me deprimía y que se desgrane todo el tiempo me volvía loca. Con Jo decidimos ponerle fijador a todas las paredes, pero antes de esto, pintamos la cocina ¡ay cuando la vimos pintada! nos decidimos por pintar toda la casa, y qué decisión ¡tan acertada! Se fue el olor a "barro", los ambientes cobraron vida y luz, y dejó de desgranarse, la casa ahora es mucho más limpia. Qué fácil era solucionar el problema, y lo mejor es que sigue teniendo las mismas increíbles propiedades, sigue siendo térmico y acústico, manteniendo el calor durante invierno y manteniendo el fresco en verano. Veo la casa y la adoro, el color que le dimos a las paredes es más o menos en todas el mismoy digo "más o menos" porque es un color hecho a ojo y como no compramos la pintura al mismo tiempo, fui haciendo a medida que avanzábamos, es látex blanco, con algo de marrón africano y un toque de negro. Podríamos haberlo hecho 100% ecológico si usábamos cal, aunque para esta parte nos falta investigación y experiencia porque lo intentamos y cuando teñimos la cal con ferrite (también natural) no se integró y nos quedaron unos manchones amarillos horrendos, que al final tuvimos que cubrir con látex. 

Entonces, al barro le digo que SI un gran SÍ, pero pintado o si les gusta mucho el color beigecito al menos ponerle fijador. Respecto a la forma, tengo mi opinión MUY personal, no es necesario hacer casas super orgánicas con los muebles incluidos, moldeando cada centímetro. Entiendo que es muy tentador cuando tenés el poder en tus manos jajaja, pero podemos hacer paredes rectas y casas cuadraditas si preferimos, claro que no quedarán a plomada, pero se puede. Bueno, quizás con adobe (ladrillos) si se pueda lograr algo bastante recto. Por suerte esta casa no tiene botellas de vidrio de colores como tragaluces o formas demasiado orgánicas, es, como dije más arriba, solo una cuestión de gustos, pero prefiero las líneas más rectas y las ventanas rectangulares. Eso sí, los ángulos rectos no existen, no hay una solo foto que me quede derecha y no es que no angulo, son las paredes, sino pregunten a Jo como hizo con los muebles a medida o con la escalera. Pero que las paredes no sean completamente rectas como en las casas de cemento es algo que disfruto estéticamente un montón y lo siento muy cálido, hasta nostálgico, por momentos pienso que vivo en una casa English Cottage de 1800.

Seguimos con los pisos. Cemento alisado abajo, madera arriba. El cemento se rajó todo, y a mi gusto me parece demasiado frío, nada de andar descalzos, a favor, es muy fácil de limpiar. En la zona del living, había un contrapiso porque la idea era poner madera, solo que como se filtraba agua nunca pudieron hacerlo, y ahí llegamos nosotros y pusimos un piso de madera reciclada 100%. Fue difícil porque hubo que buscar cada maderita para que encaje, pero con la satisfacción de tener piso de madera de descarte y sin talar árboles. Arriba es todo piso de pino-tea también de demolición, ese no lo pusimos nosotros, solo lo restauraremos. Para mí la madera recuperada es la mejor opción. El cemento no es para nada ecológico, ni tampoco me gusta estéticamente (a Jo sí) si están pensando en un piso ecológico para la cocina puede ser de materiales de descarte, baldosa de terraza, calcáreos o incluso ladrillos comunes, que si bien no es ecológico comprarlos nuevos, si son usados o de descarte, se convertirían en tal.

¡Ah! algo más respecto a la madera, muchos dicen que es difícil de limpiar o que se raya, sinceramente a mí las rayas no me molestan para nada, y limpiar, lo hago con la aspiradora (para los pelos de los perris y la tierrita) y un trapo húmedo, está rústico y gastado, eso me fascina. Nada de cera ni andar sacándole brillo... así es precioso.

Ahora las aberturas. Esta casa tiene la carpintería a medida. Casi todos los ventanales son paños fijos, excepto tres de la cocina que se pueden abrir. Todos son con DVH (doble o tripe vidriado hermético)

A mi el paño fijo mucho no me gusta, se que te ahorra chiflete, y no se dan una idea lo que un chiflete puede cambiar la temperatura de una casa. Me gusta que una ventana se pueda abrir. Y algo que me parece lo más importante para destacar, los ventanales grandes, sin divisiones, sumergidos en un lugar tan natural, es un peligro enorme para las aves. Se estrellan contra las ventanas y es horrible y muy triste encontrarlas sin vida. Para mí la vida de ningún animal justifica, tener una vista gigante a la naturaleza. Fue algo que tuvimos que solucionar, aunque todavía no lo hicimos del todo. En el piso de abajo lo conseguimos un poco usando cortinas en el ventanal del sector de lectura y en la puerta de entrada del comedor ya que no refleja tanto como si no hubiera nada. Estuve leyendo y al parecer es algo común en casas sumergidas en entornos naturales, por eso hay muchas formas de solucionarlo. La mejor es el vidrio repartido, porque entonces no es un gran bloque de espejo.

Ventanales enormes sin divisiones, no, por amor a las aves, a la naturaleza y a la vida. Un día encontramos un colibrí tirado en el suelo, fue muy triste, estaba inconsciente, por suerte lo vimos nosotros antes que los perris. Lo pusimos en una cajita y le hicimos muchas muchas caricias suaves, le hablamos, le tratamos de transmitir tranquilidad, y al final abrió los ojos y salió volando, siento que es el mismo quien sigue visitándonos en los meses más cálidos ^_^ Para mí, las aberturas de madera son las más hermosas, si están bien hechas y bien aisladas, no deberían filtrar chiflete, y eso haría que la casa sea mucho más térmica. Además, sin son hechas con madera recuperada, se convierten en ecológicas, y aún más sin son aberturas antiguas, claro que éstas tienen grandes problemas de chiflete pero todo es solucionable con una buena restauración.

Ahora los techos, y ¡qué choclazo enorme estoy escribiendo! Ojalá estén entretenidos o les sirva para su futuro hogar. Primero el entrepiso, bueno no sería tal, sino el techo de la planta baja que es el piso del primer piso jaja, como verán de arquitectura no se nada. Es abovedado, y sí, el abovedado está hecho de ladrillo común, debe haber más de mil de ladrillos. Y tampoco es tan acústico, el ruido de arriba traspasa igual, claro que menos, pero no creo que justifique. Y en cuanto a la limpieza pffff, imposible. Además están todos manchados de cuando filtraba agua del piso de arriba. Los techos externos son todos verdes, y eso sí que hace la diferencia. No solo que son térmicos sino que se mimetizan con el paisaje. Tuvimos que restaurarlos todos, en verdad aún lo estamos haciendo. Los problemas que estos tuvieron a saber: demasiada pendiente, eso dificulta que la tierra quede sostenida. Hay muchos materiales hoy en día que facilitan el armado de techos verdes, pero hace 10 años nada. Por eso mismo estos techos fueron hechos con silo bolsas, si, exactamente las bolsas que se usan en el campo para acopiar granos. No voy a entrar en detalles porque tengo un capítulo especial reservado para los Techos Verdes, una vez que estén terminados. Pero me parece no solo hermoso, sino ecológico por donde se mire, si está bien hecho, en sentido estructural, de planificación y en sentido de conciencia sustentable, es algo que todos deberíamos tener en cuenta a la hora de construir. 

¿Qué les pareció el resumen después de un año y medio de vivir aquí? ¿Sienten qué fui objetiva o me dejé llevar por los sentimientos del día a día? ^_^ 

Todas las fotos que ilustran el post, son de hace unos meses, una sesión especial que hicimos para Clota Deco Blog, aún ningún ambiente estaba finalizado, aunque claro, creemos que nunca lo estarán, porque los hogares son movimiento y siempre surgen nuevas ideas. Los únicos que se acercan más, son la cocina y el living. En estos días avanzaremos con unos detalles y quizás la semana que viene les comparta el capítulo del living-comedor. Espero que lo hayan disfrutado muchísimo y si están pensando en construir les sirva mi humilde experiencia ^_^