~ an Everlasting Garden ~ #1 Amapolas

Las amapolas son las primeras flores que cultivé en el jardín con la finalidad de secarlas, por eso me pareció lindo empezar por ellas, les tengo un cariño especial. La familia Papaveraceae tiene más de 700 especies distintas, muchas son cultivadas hace siglos en jardines de manera ornamental. Las más comunes en cultivos dompésticos son Papaver somniferum, P.orientale, P. rhoeas y Eschschiolzia californica. Muchas de estas especies tienen variedades que fueron creadas por la mano del hombre, a través de la selección artificial para lograr un color específico, más cantidad de pétalos, otro porte de planta, etc. Las especies de amapolas que hoy les voy a mostrar son las que cultivo en el jardín y son ideales para secar o prensar.

Papaver somniferum (Adormidera), como su nombre lo sugiere es de donde se extrae el opio. Es una planta anual, lo que significa que cumplen su ciclo de vida a lo largo de un año, crece, florecen, fructifican y mueren por completo, al siguiente año los ejemplares que vuelven a brotar son los que se siembran con las semillas que éstas produjeron. La variedad que tengo en el jardín es la más común, roja de flores simples, pero existen otras de flores dobles o triples, rosadas, bordó, blancas, un sinfín de posibilidades. El fruto es el más lindo de todos, enorme, globoso, en un tono verde pálido, más desaturado cuando seco.

Papaver rhoeas (Amapolilla) esta es la que crece silvestre en los campos de trigo y junto con la centaurea y la manzanilla forman la clásica imagen de los sembradíos ingleses al final del verano. También es una planta anual y tiene un sinfín de variedades, floración doble o triple, en colores rosados, pasteles, amarillos,  anaranjados, blancos, grises y hasta matizados. La silvestre es color coral o rojo. En mi jardín tengo un mix de flores dobles y simples en tonos coral, blanco, rosa y sus matices. Cada año me sorprenden con nuevos colores, es una delicia descubrirlas cada primavera. Su fruto es pequeño y algo alargado con rayas, no es tan vistoso como el de la adormidera pero aún así es muy hermoso.

 Papaver setigerum (Amapola de Troya) sin dudas mi favorita, sus pétalos tienen un tono rosado precioso, mezclado con manchas bordó intenso en la base. También es anual, oriunda del mediterráneo sur y norte de áfrica, es la que soporta mejor la sequía.  Es algo más pequeña que la adormidera en porte y flor, pero más grande que la amapolilla. En mi jardín cultivo la original, no es ninguna variedad de vivero. Su fruto es algo alargado pero también algo globoso, casi como una mezcla entre el de la amapolilla y la adormidera. 

La Amapola de Troya y la Adormidera tienden a hibridarse, eso significa que si al año siguiente sembramos con las semillas que éstas produjeron, pueden no salir del color original, puede salir una mezcla de ambos o puede dominar más un color que otro. Este año me salieron algunas en tonos bordó por esta misma razón.  Una de las soluciones que encontré para evitar lo más posible el cruzamiento, es no sembrarlas en el mismo cantero y hacerlo a destiempo. La primera en florecer es la Amapola de Troya, por lo tanto genero macizos grandes de la misma especie para que cuando las abejas lleguen a buscar su polen, se queden allí un buen rato y haya más posibilidades que no se crucen. Más tarde florece la Adormidera, si bien durante los últimos días de la de Troya y los primeros de la Adormidera se cruzan las floraciones, hay muy pocas probabilidades que una domine a otra o que no salgan al año que viene del color original. 

Híbrido entre P. somniferum y P. setigerum 

Eschscholzia californica (Amapola de California) como su nombre lo indica es oriunda de California, le gusta el clima árido y la amplitud térmica, de hecho florece mejor en lugares donde las noches son bien frías. Es perenne, lo que significa que las raíces quedan latentes y vuelve a rebrotar cada temporada, o si vivimos en un lugar con inviernos más templados puede que nunca se seque del todo. La flor y el fruto no se pueden conservar para ramos pero es ideal para prensar, queda preciosa y mantiene el color tanto de sus flores como de los pimpollos, las hojas y los tallos. 

Lo primero que les voy a compartir es mi experiencia con la siembra,  y hace especial hincapié en mi experiencia, porque no hay un manual para hacer las cosas de la mejor manera, cuando hablamos de naturaleza hay muchísimos factores que pueden cambiar las cosas y que por suerte nunca podremos dominar. En general a las amapolas no les gusta el trasplante, así que lo mejor será hacer siembra directa, es decir en el lugar definitivo. Siempre que puedo elijo la siembra directa, no me gusta tanto trabajar en almácigo y de esta forma me ahorro muchísimo trabajo. La siembra se hace en otoño, la ubicación es a pleno sol, los canteros mejor que sean exclusivos para estas bonitas porque si elegimos un lugar que ya tiene plantas crecidas les va a costar un poco germinar. Las semillas son muy pequeñas por lo tanto la mejor manera de sembrarlas, es al voleo sin cubrir, intentemos no pasarnos con la cantidad, por lo general y si la semilla es buena y fresca, el poder de germinación es muy alto. El sustrato tiene que tener buen drenaje, que sea sueltito y si es rico en materia orgánica mucho mejor. 

Podemos sembrar las tres variedades juntas y así logar una fiesta de colores y texturas, pero como les mencioné más arriba, tengamos en cuenta la posible hibridación. Hay que mantener el sustrato húmedo hasta que aparezcan los primeros brotes, en ese momento podemos reducir un poco el riego. En donde vivo el invierno es estación seca, por lo tanto tengo que regar, lo hago dos veces por semana, con eso alcanza. En mi jardín las amapolas ya se siembran solas y tienen sus propios tiempos, pero por lo general empiezan a brotar luego de las primeras heladas de otoño.

Brotes de amapola recién asomando, son muy muy pequeñitos

 Aunque no nos hayamos excedido en la cantidad de semillas por m2, al mes habrá muchas plántulas creciendo apretaditas, es momento de ralear. Sé que a muchos no les gusta y la realidad es que probé de no hacerlo y la diferencia es abismal. El raleo consiste en "entresacar" plantas para que queden más separadas unas de otras y así obtener ejemplares más saludables, fuertes, grandes y con más flores. Me parecía terrible al principio pero después me acostumbré y simplemente saco manojitos de amapolas intentando seleccionar las que vea más fuertes o que hayan crecido más grandecitas. Una vez que las plantas tengan aproximadamente 15 cm, podemos poner pasto seco u hojas a modo de mulching para mantener la humedad en el suelo y evitar la insolación de las plantas. Tengamos cuidado en no excedernos en el riego porque pueden honguearse o incluso pudrirse, por eso es importante que el suelo tenga buen drenaje. 

A partir de ahora simplemente tenemos que trabajar la paciencia y esperar a que se desarrollen, las heladas no las afectan en absoluto en su etapa de crecimiento, de hecho crecerán mucho mejor si pueden transitar temperaturas bajo cero. Ahora bien, si en donde vivimos hay heladas primaverales tardías, podrían necesitar protección pero solo si ya están floreciendo.

Durante la primavera vamos a disfrutar de un espectáculo sin igual, con cientos de abejas zumbando a su alrededor, con el vaivén de sus delicado pétalos jugando con el viento. Su floración es efímera, si hace calor, abren por la mañana y al mediodía ya no quedan pétalos, si está nublado o algo fresco pueden durar uno o dos días más.

Fruto de P. somniferum inmaduro

Para la cosecha de los frutos tenemos que esperar bastante tiempo, no solo que se caigan los pétalos sino que el fruto haya madurado. Además, no solo nos interesan las cabezuelas sino también las semillas, y para recolectarlas lo mejor es dejarlas madurar en la planta. Lo hacemos en un día sin humedad y preferiblemente que hayan pasado algunos días después de la última lluvia para que los frutos estén bien secos. Tenemos que prestar atención primeramente al color, al principio es verde, pero a medida que se va secando se va tornando marrón. Lo segundo que debemos observar son los poros por donde escapan las semillas, al principio están cerrados pero con la maduración se van abriendo para que el viento pueda pasar entre ellos y dispersar las semillas. No es necesario que estén abiertos todos los poros, pero al menos un 50%. Tengamos en cuenta que dejarlos demasiado tiempo en la planta puede estropearlos, ya que podrían mancharse o bicharse y cobrar un aspecto no muy agradable. Si fue una primavera más bien seca no hay tanto riesgo a que se estropeen, pero las lluvias frecuentes pueden honguearlos. Si no nos interesa cosechar las semillas podemos cosechar los frutos cuando pocos o ningún poro esté abierto, pero la cabezuela esté grande y robusta.

Frutos de amapolas de izquierda a derecha: P. rhoeas, P.setigerum y P.somniferum

Cosecharlos es muy divertido, vamos a necesitar un recipiente de boca ancha y hermético, puede ser un balde, tacho o incluso un frasco. Vamos a cortar los tallos del largo deseado y vamos a sacudirlos boca abajo adentro del balde, veremos como salen todas las semillitas pequeñas y negras. Una vez que cosechamos un buen manojo vamos a retirarles todas las hojas, a atarlo y colgarlo suspendido boca abajo en un lugar de interior, seco, aireado y protegido de la luz solar directa. Probablemente en el transcurso del secado caigan más semillas, por lo tanto si queremos podemos poner alguna bandeja debajo para aprovecharlas.

Fruto seco de Papaver somniferum

Fruto seco de Papaver rhoeas 

Fruto seco de Papaver setigerum

Al cabo de algunas semanas estarán listos para ser usados, no necesitan ningún otro tratamiento. Al principio tendrán una coloración verde pálida y con el tiempo se irán tornando más beigecitos. Duran eternamente si no los exponemos al sol o a lugares muy húmedos. Cada tanto es necesario retirarles el polvo que puedan acumular con un pincelito suave. Si disponemos de cajas de cartón o cajoneras, es ideal tenerlos guardados hasta el momento de usarlos, así durarán intactos mucho más tiempo y no juntarán polvo.

Para la Amapola de California la siembra directa es muy parecida a la de las otras amapolas, solo que podemos cubrir sus semillas con 0,5 mm de tierra ya que son bastante más grandes. No necesitan tierra rica, pero sí que sea suelta y con buen drenaje. Podemos ralear cuando aparezcan las primeras hojas verdaderas. La siembra en almácigo no la recomiendo, lo intenté pero muy pocas sobrevivieron, me fue muchísimo mejor con la siembra directa. 

Amapola de california lista para ser prensada

Así queda después de unas semanas de prensada 

Para cosechar las semillas de las Amapolas de California tenemos que tener paciencia e ir observando muy minuciosamente. Resulta que sus vainas explotan al madurar, sí, tal cual como leyeron, explotan diseminándose lo más lejos posible. Por eso es muy probable que cuando vayamos a juntar las semillas ya no estén. Hay que ir observando cuando las vainas se vayan tornando marroncitas, llevaremos un frasco y las apretamos un poquito desde donde se sujetan al tallo, si se sueltan solas ya están listas para cosechar. También puede pasar que al apenas tocarlas estallen, por eso hay que hacerlo muy despacito y en lo posible adentro del frasco. 

Para guardar semillas en general es conveniente esperar unas semanas a que sequen bien antes de almacenarlas.  Pasado ese tiempo, las guardaremos en sobres de papel etiquetados con el nombre y el año de cosecha, en un lugar fresco y seco. Lo ideal es dejar también algunas plantas secar en los mismos canteros, para que semillen solas y se resiembren, creciendo espontáneamente al año siguiente, eso hace que ellas manejen sus propios tiempos y sepan el momento justo de germinar. 

Creo que no dejé nada en el tintero, pero lo que sea que no haya quedado claro o si tienen alguna consulta estaré encantada de responderla. Y por supuesto que si les contagié las ganas de empezar su propio "jardín eterno" a partir del 1° de Marzo pueden conseguir la nueva colección de semillas en la Tienda de La Maison Naturaliste. Todas son cultivadas de manera agroecológica y con muchísima dedicación en mi jardín en las montañitas ^_^